"UNA MUJER EJEMPLAR: VIOLETA CORREA DE BELAÚNDE"

UNA VIDA EJEMPLAR:
VIOLETA CORREA DE BELAÚNDE
(EB- 8 de marzo de 2009)

Hace algunos meses, recibí la invitación de mi amiga Gloria Dunkelberg de Gurmendi, para la presentación en el Congreso de la República, de su libro “Violeta Correa de Belaúnde, La voz de su silencio”. Lamentablemente, por esas cosas del tiempo y la distancia no estuve en el evento exitoso, lo cual no fue motivo para recibir de obsequio su escrito, y por supuesto leerlo.

Gloria es peruana, realizó estudios en la Facultad de Arte de la PUC de Perú y a hecho un recorrido por Consultorías de Tecnologías de Información y la Comunicación (TICS); docente y coordinadora en el Instituto de Comunicación y Diseño Toulouse Lautrec, y desde luego ha pasado por todos los grados educativos desde inicial hasta el nivel superior. Eso aclara su talento expreso para el tema que toca, sumado a su parentesco familiar con la ex primera dama.

Nos presenta una Violeta de coraje, sin temores, sin sustos, responsable, compañera, esposa, dirigente, trabajadora, amiga….cualidades que no son comunes en los seres humanos cuando se entregan a la política. Con seriedad, sin máscaras, con propuestas serias, con elementales principios humanistas de respeto por los desposeídos. Fue Violeta Correa una mujer entregada a la defensa de la democracia. Esa que en la etapa republicana del Perú nos cuesta tanto mantenerla. La que le costó a su esposo y compañero hasta el final, ser deportado por una casta militar en su primer gobierno. Fue Violeta Correa la mujer que al lado de nuestro ex presidente Belaúnde supo estimular cada propósito en bien de los necesitados; mantenerse como uno más al lado de los ideales juveniles; atravesar la difícil geografía para solidarizarse con los peruanos de allá, acá y acullá…Su fortaleza moral, su corazón tierno, establecieron una cruzada personal para sacar adelante proyectos como el Club de Madres, la Minka, Asamblea Nacional de Mujeres, su exposición fotográfica itinerante “Perú ante el Mundo”, Guarderías infantiles, Postas médicas, Losas deportivas, Centros comunales varios, Talleres y bodegas comunales, Ollas comunes, Huertos caseros, Cocinas familiares, Asesoría Legal gratuita, etc. Toda una labor cotidiana de amor cristiano protegiendo a las peruanas y los peruanos de entonces, en particular a la madre y a los niños.

Es que en las damas presidenciales que siguieron a Violeta, encontramos de todo, pero a la vez nada. Una mujer esposa de la máxima autoridad política de un país, debe sentir en su carne la necesidad, la preocupación y la esperanza de soluciones varias a los problemas del pueblo. Y eso para Violeta fue pan de cada día por su tarea como secretaria del presidente primero y como fotógrafa de la realidad nuestra, enseguida.

La democracia te exige entereza, causas nobles, actuación profesional, toma propia de decisiones, y duros viajes por las tres regiones de nuestro Perú. Vivir cada día con esos principios, fecundar una obra social sabiendo que hará feliz a muchos y despertará valiosas entregas por el bien común. Violeta aplicó la democracia en la propia casa, en la oficina de palacio, en las correrías por los asentamientos humanos más franciscanos, al lado del hombre que soñó con un Perú mejor. Su silencio en Violeta Correa de Belaúnde, no sólo es de su voz, de su imagen, sino de la sencillez para evitar todo protagonismo publicitario personal, buscando el anonimato. La autora Gloria Dunkelberg de Gurmendi, no omite a ninguno de los miembros que junto a Violeta defendieron la realización de los sueños presidenciales. Fidedignamente relata el golpe militar al presidente Belaúnde en 1968, y desde luego publica algunos de los escritos que con el seudónimo de “Misia Francisca “, escribió Violeta en el desaparecido diario La Prensa durante casi un año. Con el manejo de un lenguaje sencillo, inteligible, sin complicaciones semánticas, sin exigentes traducciones lingüísticas, Gloria Dunkelberg sabe llegar a sus lectores, pero lo más importante aún, es que nos obsequia la verdad de su propia y cercana cosecha. Con ansias y expectativas esperamos la segunda parte biográfica de Violeta Correa de Belaúnde “Violeta por ella misma” que no promete la autora, para no sólo deleitarnos con su estilo, sino para disfrutar de los artículos de Violeta Correa, cuyos relatos al parecer siguen vigentes….