SIGA APORTANDO Y PARE DE SUFRIR

SIGA APORTANDO Y PARE DE SUFRIR
(EB-22 de agosto de 2009)

Pasé hace unos días, por una de las salas cinematográficas, que los grupos protestantes convirtieron en “iglesias” en todo nuestro territorio… Lo que me llamó la atención fue la presencia de unos “matones” de terno y corbata cuidando la entrada y el interior del “templo”, como si algún importante funcionario del gobierno, fuera a ingresar a hacer la oración entre gritos y teatralizado mejunje que irradia en locura. Estos guardaespaldas reciben un jugoso sueldo de la iglesia en mención, ya que de otra manera no se explica su interés por resguardar orden, donde lo que debe brillar es paz. Esta llamada “Comunidad Cristiana del Espíritu Santo” es conocida en nuestro medio como “Pare de Sufrir”. Hace aproximadamente 14 años llegaron a instalarse en el Perú y como es atractivo el dejo de un portugués hablando mal el castellano, se quedaron aquí convirtiendo a los auténtico peruanos (léase cholo) en imitadores falsos de su personalidad equivocada de pastores que trasmiten amor, paz y bondad plena por el necesitado, angustiado o apartado de la sociedad.

Recientemente denunciado, el caso de la iglesia “Pare de Sufrir”, se suma a muchas que por el estilo, engañan a sus creyentes con el cuento del “diezmo”. Cuanto más dinero das a la iglesia, el cielo te lo devolverá multiplicado. Nada menos que un “diezmo” que siempre beneficia a la cúpula que dirige al grupo, donde se ubican los vivos que tomando la Santa Biblia, hacen una interpretación del texto, a su favor. Y es que en el interior de los recintos de este grupo, han creado una doctrina basada en el diezmo, lamentablemente en su mayoría gentes de escasos recurso intelectuales y económicos.
Es una secta que se pasa el tiempo criticando a los católicos, como se basan la mayoría de los grupos ajenos y contrarios. Y nada menos se observa a través de los canales de televisión que contratan con una facilidad económica que no pueden hacer otros credos, la venta de agua sagrada, astillas de la cruz de Cristo, el camino de la sal, baños de florecimiento, el manto sagrado, la rosa bendecida, la cartita que escrita se deposita en una vasija de cristal para conseguir favores divinos, etc., previo pago de una cantidad de dinero para lograrlo.

Esta “iglesia” ha logrado fortalecerse en más de 172 países desde 1977 que se le ocurrió “por inspiración divina” a su líder espiritual el obispo brasileño Edir Macedo. Precisamente es el cine “City Hall” en el distrito de Breña, otrora de mucho prestigio como sala de estreno y posterior centro de proyección de películas lacrimógenas de origen Indio, el que ellos transformaron de la noche a la mañana con una capacidad económica envidiable. El caso es que se ha desatado un escándalo en Brasil, donde se ha comprobado que esta iglesia liberada de impuestos (todas deberían pagarlos), recauda ingentes cantidades de dinero, que evade rendir cuentas y guarda sus activos en bancos extranjeros.

Los creyentes deben asistir durante 13 veces para que se “realice el milagro”. Cada una de las veces debe llenar un sobre con el diezmo. La iglesia ocupa su tiempo con diversas invitaciones en el transcurso de la semana. Se inculca creencias pasadas de moda o propias del oscurantismo del medioevo: brujería, el mal, hechicería, suerte, posesión demoníaca, niegan orar por los muertos, etc. dentro de una actuación litúrgica siempre teatral.

Según las investigaciones de la policía en Brasil, este grupo religioso recibe más de 2 millones de dólares mensuales de los “diezmos”. A su fundador se le encontró en 1990 la suma de 100 millones de dólares, por lo que fue declarado culpable de fraude y malversación de fondos. Cámaras escondidas en diferentes países del mundo donde se ha establecido la secta, muestras pasajes donde el obispo enseña a sus “pastores” las artes para sacarles dinero a sus incautos creyentes. Se establecen siempre en los antiguos cines y teatros de barrios pobres y populares, organizan cultos semanales para que la asistencia sea masiva y el “diezmo” sea elocuente. En nuestro país sigue la investigación a “Pare de Sufrir”, y seguramente ellos encontrarán en la Fiscalía y Policía Contable, los personajes apropiados para que con buena coima, puedan seguir engañando a los pobres y desposeídos del país, sin ser castigados ni en la tierra y seguramente, en el cielo tampoco.